El pasado Gran Premio de Japón dejó un mal sabor de boca en los pilotos y en los aficionados de la Fórmula 1 cuando, en condiciones muy similares a las que vivieron en 2014 -año del fatal accidente de Bianchi-, el protocolo que dicta cuándo una grúa puede entrar a pista falló. Fue en la primera vuelta de la carrera cuando Carlos Sainz tuvo aquaplaning y acabó contra el muro. Con el Safety Car en pista y Pierre Gasly descolgado del grupo, una grúa salió a rescatar el Ferrari, poniendo en peligro a todos los pilotos y comisarios que estaban en la zona.

Afortunadamente, la reacción de la FIA ha sido rápida y se reunieron de urgencia tras la carrera de Suzuka. El nuevo protocolo avisa a los ingenieros cuando hay una grúa en pista y son estos quien se lo comunican inmediatamente al piloto, para que tengan precaución.

“Es un mensaje que me hubiera gustado tener en Suzuka, porque habría cambiado por completo mi enfoque en esa zona de la pista“, dijo el Pierre Gasly sobre la grúa que salió en Austin a rescatar el coche de Bottas, “que encuentre más formas de hacerlo aún más seguro”.

Me encanta la proactividad y las reacciones cuando las cosas no salen según lo planeado. Me encanta que la FIA se lo tome en serio, elabore un informe y trate de sacar conclusiones”, comentó también Carlos Sainz sobre las medidas adoptadas.

“Es la forma en que todos debemos trabajar juntos. Es quizás lo que nos faltaba al comienzo de la temporada y se nota que están tratando de mejorar. Vamos a estar ahí para apoyarles todo el camino“, expresó el de Ferrari para finalizar.

 

Imagen: lasexta