Antes del enfrentamiento en las calles de la capital suiza, la ventaja de Vergne era sólo de seis puntos. Ahora, está 32 puntos por delante de su principal rival, Lucas di Grassi. El campeón reinante de la Fórmula E parece tener a mano un segundo título del Campeonato de pilotos, incluso antes de la gran final en New York. Pero, como sabemos por experiencia, nada es seguro en el mundo de las carreras totalmente eléctricas.

Un EPrix moderado

El poleman Jean-Eric Vergne (DS TECHEETAH) lidera el #SwissEPrix desde que se apagan las luces hasta la bandera a cuadros en una caótica carrera marcada por una bandera roja y una fuerte lluvia sobre el final. Para el francés, no todo es un tranquilo caminar por el parque. Su retrovisor marca el avance y la molestia guardia que Mitch Evans ejerce sobre él. El piloto de Panasonic Jaguar Racing presiona a Vergne hasta las últimas curvas tratando de inducirlo a cometer errores. Sin embargo, como todo ‘zorro viejo’, Jean-Eric no da lugar a las iniciativas del neozelandés, reflejando cada movimiento de Evans para mantenerse primero en pista a base de estrategia y enfoque.

Sebastien Buemi, como uno de los locales, cumple su tarea de llevar el Nissan e.dams #23 al último escalón del podio y festejar ante su público sin sobresalto alguno. Mientras tanto, la grilla de llegada se reacomoda luego de la penalización que le imponen a André Lotterer. El alemán pierde su cuarto puesto por un Drive Through que se convierte en 22 segundos de recargo por ignorar la luz de salida de los pits. De esta manera, Sam Bird (Envision Virgin Racing) sube un lugar que le significan 13 puntos, aunque matemáticamente queda fuera por la pelea del Campeonato 2018/19. Por su parte, el piloto #36 del DS TECHEETAH cae al puesto 14 quedándose fuera de los puntos y mira a su compañero de equipo a 44 puntos de distancia.

La carrera se suspende temporalmente en la primera vuelta con una bandera roja provocada por una maniobra errada de Pascal Wehrlein: dobla cerrado en la primera curva, queda trabado y origina una reacción en cadena impidiendo el paso del resto de los autos. Aunque se ve atrapado en la colisión de la primera curva, Maximilian Günther restablece la estrategia del equipo y alcanza la quinta posición en el clasificador. Los puestos puntuables lo completan: Daniel Abt (6to), Alex Lynn (7mo), Felipe Massa (8vo), Lucas Di Grassi (9no) y Stoffel Vandoorne (10mo).

Los protagonistas nos cuentan…

“Llegué aquí como un zombi, sin embargo, creo que el equipo me ayudó masivamente a hacer un buen trabajo. 32 puntos es una buena ventaja, es una ventaja más grande que la que tuve el año pasado en este momento, pero no estoy pensando demasiado en el título del Campeonato”, dijo Jean-Eric Vergne de DS Techeetah, momentos después de obtener su tercera victoria esta temporada en la histórica ciudad de Berna.

“La calificación fue un asco”, dijo el piloto de Audi Sport Abt Schaeffler Lucas di Grassi sin rodeos. “Juzgamos mal lo mal que estaba la pista y al ser el primero en salir, mi vuelta no fue buena. Cometí algunos errores aquí y allí y empecé en el 19… si calificas en la parte de atrás, estás acabado”. Palabras fuertes aunque comprensibles del ex campeón. Antes de Berna, la brecha entre di Grassi y el líder del campeonato Jean-Eric Vergne eran sólo de seis puntos. Ahora, después de una sorpresa en la capital suiza, la brecha se ha ampliado a 32. Con Vergne aún a la cabeza y dos rondas restantes, el brasileño aún está listo para lograr su segundo título en la ciudad de Nueva York: “Hasta que las probabilidades matemáticas sean imposibles, pelearé por el título, nunca me rendiré”.

“Este EPrix fue bueno, especialmente en casa, con mi hijo”, dijo Sebastien Buemi, de Nissan e.dams, después de bajar del podio con su hijo. “Si hay algún lugar donde quieras un podio, es en casa. Estoy muy contento con cómo se desarrollaron las cosas hoy y estoy contento con el equipo. Obviamente, no tener una victoria [en 30 carreras] me afecta. Pero seguiremos presionando y esperamos la próxima. Voy a Nueva York sabiendo que podemos hacerlo y podemos luchar”, dijo con una sonrisa.

Cuando el polvo se asentó en la pista de 14 giros, Evans ve su reflejo en el circuito de las calles de Berna tras un segundo puesto y el segundo podio en su carrera de Fórmula E. “Esperaba que fuera un poco más fácil de superar… pero con la lluvia al final, sólo fue un caos”, dijo el Kiwi. “La curva 3 estaba mojada y eso es exactamente lo que no quieres. Predecir la zona de frenado fue extremadamente difícil. Iba a jugar con fuego si intentaba tener una oportunidad de sobrepasar a JEV”.

La Gran Finale en New York City

Con el título en juego y ocho pilotos con chances matemáticas de disputarlo, el Campeonato de la Fórmula cruza el Atlántico para el enfrentamiento de final de temporada. Con el impresionante horizonte de la ciudad de New York el 13 y 14 de julio, ¿alguien será capaz de hacerle frente a Jean-Eric Vergne?

 

Autora del artículo: Estefanía Ferreira/@estefaniamdq

Imágenes: Fórmula E