Uno de los males endémicos que ha sufrido la F1 en los últimos tiempos es las grandes diferencias existentes entre los equipos grandes (Mercedes, Ferrari y Red Bull) y el resto de los equipos. A finales de la década pasada raro era el equipo que se quedaba sin, al menos, un podio a lo largo de la temporada. Ahora, por el contrario, es muy raro que algún equipo fuera de los 3 grandes pueda pisar el cajón.

Es por eso que se están estudiando medidas para poder igualar la parrilla y poder mantener los a equipos privados, cuya economía está muy mermada debido a la crisis del COVID-19. Una de las medidas que se están estudiando es limitar el tiempo que pueda dedicar cada equipo en el túnel del viento en función de cuál sea la posición en la que terminó en el campeonato pasado.

De esta forma aquellos equipos con peor rendimiento en una temporada podrían disfrutar de más horas de túnel del viento y de CFD en comparación con los que presenten una mayor prestación, que verían limitados sus recursos para evolucionar el coche en la temporada siguiente.

Aparte de ello, también se están estudiando otro tipo de medidas, como puede ser un sistema de “tokens”, que limite la evolución de determinados componentes, sobre todo los relacionados con la unidad de potencia.

Estas propuestas han sido sometidas a votación por parte de los jefes de los respectivos equipos a lo largo de este viernes y se espera que, en breve, se den a conocer los resultados y las conclusiones a las cuales se ha llegado.

 

Autor del artículo: Daniel Ballarín

Imagen: Scuderia Ferrari F1