Todos sabemos que RedBull es una escudería atípica de la F1, en donde sus pilotos destacan por su talento y su juventud. Max Verstappen ha demostrado sobradamente su talento, aunque por su juventud e inexperiencia ha ido cometiendo errores en algunos GP que ya no deberían ser de recibo. Por ello resulta hasta lógico que dentro de cualquier equipo, sea el piloto “veterano” el que se atreva a dar algunos consejos al más novato.

En el caso de RedBull, no le queda otra a Daniel Ricciardo, que desarrollar el papel de piloto más experto, para tratar de que Max sepa asentar su pilotaje, sin perder lo que le hace un piloto extraordinario. Parece que sus palabras intentan aplacar el ímpetu normal del piloto neerlandés: “Pienso que entre sus virtudes supongo que está su determinación. Obviamente él trata de empujar su coche al máximo y obviamente eso es una verdadera buena cosa. Entre sus debilidades, yo diría que está su edad. Pero no su edad en el deporte. Lleva compitiendo en carreras desde hace bastante tiempo por lo que no es necesariamente eso, pero sí pienso que es probablemente necesario para la propia vida. Probablemente se esté quedando ya con distintos aspectos de los mayores, como por ejemplo el año pasado cuando estuvo haciendo algunas cosas con los frenos. Muchos los pilotos más experimentados dirían: ‘Mira, no creemos que eso sea lo correcto’ o algo así. Max es más de: ‘Sé lo que estoy haciendo’. Sabes que eso es tanto una virtud su independencia como también una debilidad”. Pero eso es algo que se adquiere con el tiempo, y es probable que entonces él entienda un poco mejor los consejos de los veteranos”.

A pesar de esas valoraciones de su compañero, Daniel Ricciardo considera que la llegada de Max ha resultado beneficiosa tanto para el equipo como para él mismo: “Siempre trato de aprender de todo el mundo. Como las carreras de motor ya son un deporte suficientemente técnico, pienso que siempre hay diferentes cosas que puedas aplicar, una técnica diferente o ya sea una diferente manera de ajustar el setup de tu monoplaza. Honestamente soy incapaz de decir una situación en la que piense: ‘Bien, he aprendido tal cosa de Max’. Si es su técnica, su forma de frenar, lo que sea, pienso que todo eso se aprende de manera subconsciente. Porque ambos estamos muy motivados y determinados para vencer, constantemente nos ayudamos el uno al otro, y además nuestros ingenieros tratan realmente de encontrar una manera diferente de configurar el coche. Tal vez hubo algunas cosas el año pasado con el setup. Así que empezamos con unas configuraciones bastante diferentes para luego tratar de fusionarlas. Quizás yo tuve que hacer algunas cosas que pensaba que no iban a funcionar, y él en su caso supongo que otras. Por cosas como estas, quizás sea esa la manera de empezar a aprender”.

El piloto aussie se encuentra motivado para optar a ganar un título en un futuro, aunque no muy cercano según sus palabras: “Creo que tenemos que ir viendo cómo va el resto del año y considero también que si somos capaces de tener una segunda parte de la temporada más fuerte, como sucedió el año pasado, entonces creo que sí podríamos dar un gran salto para el año que viene. Por eso pienso que lo que vaya a suceder en esta segunda parte del año pueda generar grandes diferencias de cara al año que viene. Esperemos que entonces podamos crear un coche ganador. Vamos a esperar. Vamos a esperar los próximos 18 meses”.

De su futuro, Ricciardo se mostró confiado en la mejora de su monoplaza en un futuro próximo, aunque sin cerrar las puertas de otras escuderías: “Pienso que una vez que se cumplen los 30, quizás uno comienza a sentir un poco más de presión por aquello de estar en el lugar y en el momento correcto. Pero tengo 27 años, aún soy ciertamente joven. Digamos que tengo los próximos 18 meses con RedBull para realmente darlo todo y después ya veremos. Y entonces sí, cuando ya haya cumplido los 30, probablemente vaya a estar un poco desesperado por un buen movimiento, pero al mismo tiempo digo que todo lo quiero lo antes posible, y por todo se entiende un título mundial. Siendo honesto, no (sueño con Ferrari). La gente habla de Ferrari, de su historia y todo eso, y yo desde niño crecí siendo un fan. Cuando piensas en F1, supongo que piensas en Ferrari. Seguramente forman parte de la historia la mayoría de los pilotos que han pasado por el equipo, pero yo probablemente con este proceso no fuera tan sentimental, especialmente ahora que aún no he ganado un campeonato. Valoraría más un equipo que me pueda hacer ganar un título antes que un equipo con una mejor historia. Quien quiera que sea, en el futuro obviamente, ya se sabrá. Al menos por ahora, como he dicho, los próximos 18 meses realmente espero que sean en un RedBull”.

 

Autor del artículo: Roberto González/@robertoglezf1

Fotos: @F1