Red Bull se lleva la primera victoria del año con doblete de sus pilotos en el podio y Carlos Sainz cerrando el podio.

Luz verde a la nueva temporada de Fórmula 1. Bajo los focos del circuito de Baréin se encontraban los 20 pilotos que lucharían por el mejor resultado en la primera carrera del año, pero con pocas posibilidades ante un Max Verstappen que salía en primera posición.

Se apagaba el semáforo y, como era de esperar el actual campeón del mundo salía sin complicación alguna, detrás de el mantenían las posiciones Charles Leclerc segundo y George Russel tercero. Hacia el final de la parrilla había un poco más de lio en la primera curva, aunque sin consecuencias.

A pesar de eso la carrera ha transcurrido de manera tranquila y con el dominio del actual campeón del mundo, que ha iniciado la nueva temporada de la misma manera que acabó el 2023, con victoria. Pasaban las vueltas y la ventaja del holandés respecto al segundo clasificado era cada vez más grande dejando un grupo de cuatro, George Russell, Checo Perez y los Ferraris de Carlos Sainz y Charles Leclerc, en una lucha por el segundo puesto.

A la espera de ver lo que podía hacer Fernando Alonso tras los entrenamientos previos, el asturiano se veía con problemas y sin capacidad de luchar por posiciones de arriba dejándole en una novena posición detrás de Oscar Piastri y Lewis Hamilton quien comunicaba por radio que su asiento se rompía en mitad de carrera.

A Charles Leclerc cada vez se le complicaban más las cosas y su incomodidad con el monoplaza se hacia notar en pista provocando que tanto el Red Bull de Pérez como Sainz le pasaran dejando a Russell y Leclerc en una lucha aparte y haciendo todo lo posible por mantener a Lando Norris en la sexta posición por detrás de ellos.

Pasaban las vueltas y la clasificación cada vez era más clara, con Verstappen como cabeza a su lado Checo Pérez y Carlos Sainz cerrando el podio en una carrera en la que todos los pilotos han conseguido acabar.

 

Autor del artículo: Paula Bernabeu

Imagen: F1