Los entrenamientos libres en Hungaroring desvelaron las dificultades que debía superar el equipo Williams. En primer lugar un trazado que se hace adverso a las características del FW40, no hay espacio para dar rienda suelta al caballaje disponible bajo la tapa motor. Con la principal arma del equipo de Grove sin poder ser disparada, se suma la incorporación de Paul Di Resta en lugar de Felipe Massa. El brasileño debió de visitar el centro médico y posteriormente el hospital más cercano tras los libres dos del día de ayer por indisposición según declara el equipo en un comunicado oficial.

Tras pasar con éxito los chequeos procedimentales, los síntomas persistieron en la última sesión de entrenamientos. Con lo que el piloto escocés regresaba a la F1, su última participación en sesión oficial data en 2013 con Force India en el Gran Premio de Brasil. Tras pasar por el DTM con Mercedes, volvió a la máxima categoría en calidad de tercer piloto del equipo de Grove. Retorno precipitado, de ahí el resultado en la clasificación:

“No voy a mentir, estaba asustado, nervioso, ansioso. No he pilotado uno de estos coches desde hace tres años y medio, aparte de 10 vueltas que hice en un coche de 2014 y entonces vas directo a clasificar. Es como caerse de un acantilado y ver como puedes luchar por sobrevivir”

“Definitivamente el equipo me preparó tanto como pudieron en una hora y media. Estaba muy seguro a altas velocidades, seguro en las salidas y realmente no usé las ruedas traseras como debía”

“Logré un ritmo razonable pero frenaba un poco pronto, igualmente el coche iba rotando un poco rápido para mí en ciertas curvas por lo que no iba sacando lo suficiente de él. Incluso el recorrido del pedal de acelerador es mucho más largo de lo que estoy acostumbrado, así que fue como cuánto podía empujar sin trompear a toda potencia”. Comentaba el piloto escocés.

Decimonovena posición de partida para un piloto que vuelve a debutar, se podría decir. Sin tiempo de preparación irá a ciegas también para la carrera. Deberá habituarse a un monoplaza cargado de combustible y al comportamiento de unos neumáticos que no ha testado más allá de las 11 vueltas dadas en Q1. Un reto máximo, con todas las letras.

Haciendo compañía a los Sauber, ya que Lance Stroll solo pudo lograr la decimoséptima posición. El canadiense queda detrás de un grupo cuyas diferencias se hallan en apenas una décima, desde la decimocuarta posición encabezada por Sergio Pérez seguido a su vez por los Haas:

“No fue la mejor clasificación en términos de posición, pero supe que sería difícil para nosotros y al final simplemente tenemos que ser competitivos. Estuvimos a tan solo una décima más o menos de la Q2, y es frustrante ya que pienso que hubieron un par de cosas en mi vuelta donde pude haber mejorado una décima, pero siempre se puede decir esto después. Simplemente es un fin de semana difícil para nosotros, no somos tan rápidos como queremos y es claramente falta de pura aerodinámica. Necesitamos seguir empujando para ver qué pasa en la carrera de mañana”. Resume Lance Stroll.

 

 

 

Autor: Pablo Bernal / @PabloBernal333

Foto: Sutton Images