• La victoria 33 de Fernando Alonso en Fórmula 1 ya es una prioridad en Aston Martin.
  • El equipo se deja la vida por darle el mejor coche y confían en que la logrará pronto.
  • De conseguirla, sería la primera victoria para Alonso desde el GP de España de 2013.

Si algo ha quedado claro con el paso de los años, más aún en este, es que ningún piloto de la parrilla puede ganar en motivación a Fernando Alonso. El bicampeón mundial se quedó con la miel en los labios en 2012, donde solo cuatro puntos le impidieron ganar su tercer campeonato de Fórmula 1, que habría sido el primero con Ferrari.

Los años posteriores no fueron precisamente agradables para el piloto español, quien, tanto en Ferrari como en McLaren, y posteriormente, en Alpine, observaba cómo sus opciones de ser competitivo se disipaban.

Ahora, esa ilusión ha vuelto para Fernando tras su decisión de unirse a Aston Martin. El panorama en la escudería es muy distinto a años pasados para Alonso: cuenta con un equipo que le apoya, tiene un compañero de escudería que respeta sus límites y es generoso con él, y se ha ganado el liderazgo absoluto por su amplia experiencia.

Tanto es así, que su ansiada próxima victoria, que sería la 33 en Fórmula 1 para él, es ya toda una obligación en las filas de Aston Martin. El jefe de equipo de Aston Martin, Mike Krack, ya ha advertido de que no van a parar hasta conseguir devolver a Fernando a lo más alto del podio: “Tratamos de alcanzarlo lo antes posible”.

Krack también ha resaltado que deben ser prudentes, porque las ganas de que llegue la ansiada victoria no deben eclipsar la realidad que viven en el momento: “No quiero hacer predicciones, creo que es importante ser realista en cada momento”.

Con ello, Krack hace alusión a algunos circuitos en los que Aston Martin confiaba en que llegara la 33, y finalmente no pudo ser.

Un ejemplo es Mónaco, donde Alonso quedó segundo, pero fue incapaz de superar a Verstappen, lanzado como un misil, algo que el propio jefe de equipo reconoce: “Ya me preguntaron esto en Melbourne y dije que pensaba que sería en Mónaco. Estuvo muy cerca en Mónaco”.

 

Fernando Alonso, un ‘jefe en la sombra’

Si bien es uno de los dos pilotos de Aston Martin, Fernando Alonso mantiene un hegemónico liderazgo que ha contribuido a la fantástica sintonía en la escudería. Mike Krack ha reconocido que “Fernando tiene habilidades que mucha gente no tiene” y resalta también que “está guiando al equipo, motivándolo mucho”.

Lo cierto es que la dinámica de equipo que hay en Aston Martin no tiene nada que ver con la que se veía en Alpine, donde las continuas pullas de Ocon contra Alonso hacían imposible una química adecuada para que el equipo cumpliera todos sus objetivos.

La llegada de Alonso a Aston Martin planteó inicialmente dudas. Su compañero de equipo, Lance Stroll, es el hijo del jefe de la escudería, y eso planteaba muchas dudas sobre si este podría llegar a tener preferencia sobre Fernando.

Nada más lejos de la realidad. El compañerismo de Stroll es ejemplar y tanto él como Alonso tienen una fantástica relación, donde los lazos padre-hijo que hay entre el jefe y uno de los pilotos no han influido en absoluto para los objetivos del equipo.

 

Maestro y aprendiz, unidos por una misma causa

No es una exageración asegurar que Fernando Alonso es el maestro y Lance Stroll el joven aprendiz que tiene un futuro prometedor en la Fórmula 1. El piloto español comenzó su aventura en el Gran Circo en 2001, con apenas 20 años, y desde entonces, solo ha estado ausente en tres temporadas: 2002, 2019 y 2020.

Esta temporada es ya la 20ª de Alonso en Fórmula 1… y no va a ser la última. Por esa razón, ya hay motivos para pensar que la victoria 33 será solo el comienzo. Alonso quiere seguir haciendo historia. Con la ayuda de Stroll, de todo Aston Martin, y de tantos fans que siguen apoyándole.

 

Autor: Enrique Forján

Imagen: Aston Martin