No es ningún descubrimiento el hecho de que el inicio de temporada de Mercedes no ha sido el esperado ni por el propio equipo. Aunque ya en pretemporada avisaban de que no tenían el rendimiento que querían, nadie se esperaba que las balas plateadas estuvieran por detrás de Aston Martin e, incluso en momentos puntuales, de Ferrari, a pesar de que el inicio de los de Maranello ha sido igual de decepcionante que el de los alemanes. No obstante, desde Mercedes ya se han puesto manos a la obra y están en proceso de poder evolucionar y corregir el monoplaza lo antes posible.

Mike Elliot, jefe de diseño de Mercedes AMG F1

“Después de Baréin tuvimos que aceptar que no estábamos donde queríamos estar. Así que los ingenieros están muy ocupados en ese sentido con la aerodinámica, con la forma del coche, con cosas como la geometría de los pontones, la geometría del suelo. Pero también estamos intentando ver a través de la simulación si estamos apuntando a las cosas correctas”, ha comentado Elliot.

Si por una cosa se caracteriza el equipo Mercedes, es por tener los recursos y los medios para poder revertir situaciones como esta. Prueba de ello fue el desarrollo de la temporada pasada, 2022, donde empezaron teniendo que luchar contra equipos, a priori, inferiores, como Alpine o Alfa Romeo, y acabaron la temporada teniendo un monoplaza más rápido que el Ferrari (que no olvidemos que era el monoplaza referencia a principios de temporada) e incluso llegando a pelear con Red Bull en algunas carreras puntuales.

“Baréin fue una auténtica prueba de realidad y encontrarnos en la posición en la que nos encontramos. Sin ser nada competitivos, fue una auténtica decepción para todo el equipo. Pero tienes que superarlo, y de hecho, caminando por la fábrica se respira mucha energía, hay una gran cantidad de trabajo en curso, estamos empezando a ver algunos de los desarrollos de lo que seguro que nos va a devolver a esa lucha por el campeonato”.

 

Autor del artículo: Daniel Ballarín

Imagen: Mercedes AMG F1