La escudería de Brackley llevará al Gran Premio de Estados Unidos el último paquete de mejoras para el W14, con el que estrenarán un tren inferior.

La Fórmula 1 vuelve este fin de semana a Austin, sede del Gran Premio de Estados Unidos, una cita señalada en el calendario de Mercedes. Por lo general, los coches de las flechas plateadas han rendido bien en este trazado, sacando a relucir las cualidades de sus monoplazas.

La temporada pasada fue en este circuito donde debutó el último paquete de mejoras significativo de Mercedes, hecho que provocó un importante avance en el rendimiento. Lewis Hamilton subió al segundo escalón del podio, pues la victoria se le escapó a pesar de luchar por ella.

Al igual que en 2022, Austin será el escenario en el que Mercedes traerá su último gran paquete de actualizaciones con un fondo modificado para el W14. El objetivo es mejorar en rendimiento para mantener la segunda posición en el Mundial de Constructores, plaza por la que luchan con Ferrari.

Además, también tienen como objetivo recopilar la mayor información posible que sirva para el monoplaza de la próxima temporada. El desarrollo del W15 ya está en marcha y han pasado a estudiar la aerodinámica del coche. Es muy normal que se aproveche el final de una temporada para realizar pruebas que ayuden a entender mejor ciertos aspectos de los monoplazas de cara al futuro.

“Siempre es agradable correr en el Circuito de las Américas. Hay un ambiente fantástico y la ciudad recibe a la F1 con los brazos abiertos. El COTA es uno de los circuitos modernos más desafiantes y es una verdadera emoción para los pilotos. Llevaremos un fondo modificado, que es la última actualización significativa que [tendremos] este año. Esperamos obtener una pequeña ganancia, pero lo más importante es que es otro hito en la definición de nuestro camino de desarrollo para el W15”, comentó Toto Wolff, director de la escudería Mercedes.

Desde que el equipo decidió abandonar el concepto sin pontones tras el Gran Premio de Mónaco del pasado mes de mayo, el desarrollo del actual monoplaza ha cambiado por completo. En las carreras posteriores a Mónaco, Mercedes ha estado más cerca de sus rivales. Prueba de ello, su segundo puesto en Constructores, a 28 puntos de ventaja con Ferrari.

“La batalla por el segundo puesto en el Mundial de Constructores se ha vuelto más intensa en las últimas carreras. Mantendremos la cabeza baja, seguiremos empujando y aspiraremos a conseguir tantos puntos como podamos para aumentar nuestra ventaja”, añadió Wolff.

Catar ha dejado huella en Mercedes

El Gran Premio de Catar podría haber sido una buena oportunidad de sumar una gran cantidad de puntos para el equipo Mercedes, debido al gran rendimiento del coche. Sin embargo, un toque entre Hamilton y Russell en la primera curva tras la salida hizo que el heptacampeón tuviera que abandonar la carrera, mientras que su compañero acabó en el fondo de la parrilla. George Russell protagonizó una remontada épica que le llevó a cruzar la línea de meta en cuarta posición, por delante del Ferrari de Charles Leclerc.

En Mercedes estaban convencidos de que el W14 tenía ritmo para luchar contra McLaren, incluso, con una buena estrategia, hacer frente a Verstappen. Por ello, el incidente entre sus pilotos no les supo nada bien. “La última ronda en Qatar fue un ejemplo de lo que podría haber sido. Como equipo, nunca quieres que tus coches se toquen”, indicó Toto Wolff.

“Fue frustrante [perder] muchos puntos, sobre todo porque el ritmo del coche era muy bueno. Sin embargo, fue alentador ver cómo reaccionaron los pilotos y el equipo. Tanto Lewis como George saben que el equipo es lo primero. Estoy seguro de que todos creceremos a partir de este momento. Ahora nos centramos en Austin y en asegurarnos de que sacamos el máximo partido de cada fin de semana”, concluyó el jefe de Mercedes.

 

Autor del artículo: Patricia Ledesma

Imagen: Mercedes AMG F1